El mayor legado de Douglas Tompkins
La herencia que le dejó Douglas Tompkins a los chilenos es más profunda que la donación de terrenos al Estado para crear parques nacionales; su mayor legado es la creación de una conciencia ambiental y la formación de una noción filantrópica nunca antes vista en Chile.
Más que la creación de parques y la donación de tierras, el mayor legado de Douglas Tompkins fue estimular en los chilenos la protección y conservación de los bosques y las áreas silvestres e instalar en Chile un modelo de desarrollo para la Patagonia y para los territorios de alto valor ecológico.
La conciencia y el desarrollo de proyectos ambientales y de conservación hoy en Chile ya no están limitados a un pequeño grupo de ecologistas o a iniciativas provenientes del Estado. Luego de su ejemplo, un número importante de grandes empresarios chilenos están hoy contribuyendo a la conservación de nuestro patrimonio ambiental. Incluso se podría decir que invertir en conservación y en negocios relacionados con el ecoturismo es bien visto. Fue el propio Sebastián Piñera quien, asesorado por Tompkins en 2004, compró al empresario maderero Jeremías Henderson 115 000 hectáreas de bosque nativo al sur de Chiloé para crear el Parque Tantauco. El mismo Tompkins vendería tiempo más tarde algunos de sus fundos a los empresarios Jorge Claro y Nicolás Ibáñez. Este último posee además varias miles de hectáreas en Puerto Williams. La lista es extensa e incluye no solo a empresarios chilenos, sino también a celebridades extranjeras, inversionistas y ecologistas. Tompkins también impulsó a otros ambientalistas a seguir su ejemplo.
El ingeniero forestal Carlos Cuevas, quien por más de quince años fue su brazo derecho, en 2007 inició su camino propio y se concentró en reactivar la fundación Melimoyu para promover la creación de un parque marino-terrestre que cristalizaría en febrero de 2014 cuando el entonces presidente Sebastián Piñera firmó el decreto de creación del Parque Marino Tic-Toc, una zona de protección marina de 87 500 ha, la más grande de Chile continental.
Si nuestro ejemplo ayudó a formar una noción filantrópica en los chilenos, somos felices”, Douglas Tompkins
“Si nuestro ejemplo ayudó a formar una noción filantrópica en los chilenos, somos felices”, declaró Tompkins en su última entrevista publicada en la revista Paula.
En ella, el empresario ecologista también daría luces de sus deseos de terminar con el proceso de donación al Estado del Santuario de la Naturaleza Pumalín y materializar la creación de los parques nacionales Patagonia y Alacalufes, las que incluyen la donación de más de 79 mil hectáreas de la Estancia Chacabuco en Cochrane y otras 26 mil 200 hectáreas en la isla Riesco (Cabo León). De parte del Estado de Chile, está por verse, primero, si el Gobierno está dispuesto a ceder predios fiscales para crear nuevos parques, como lo pidió el empresario estadounidense; y segundo, qué tan desarrollada está la institucionalidad chilena para administrar de buena forma estos parques, que serán entregados, en palabras de Tompkins, “con una infraestructura de alto nivel, muy bellos y de un diseño muy particular. Cuando entreguemos nuestros parques, lo haremos llave en mano. Aquí está, úselo”, dijo semanas antes de perder la vida en el lago General Carrera.
En las páginas siguientes presentamos el estatus y la historia de los proyectos de Douglas Tompkins en Chile, los que sumados a los que ha desarrollado en Argentina, equivalen a más de 816 mil hectáreas, de las cuales dos tercios corresponden a territorio chileno.
PARQUE PUMALÍN / 283.000 Ha / En Proceso de donación
Apenas llegó a Chile en 1991, Douglas Tompkins compró 17 mil ha en el valle Reñihué, provincia de Palena. La idea del ex dueño de Esprit era proteger de la explotación maderera este bosque y establecerse en forma permanente en la zona. Una vez establecido, Tompkins comenzó a ampliar las tierras de conservación en el área adquiriendo otras propiedades a colonos, totalizando un total de 283 mil hectáreas. Este hecho lo enfrentó a políticos locales y nacionales, llegando incluso a la intervención del entonces presidente de la época, Eduardo Frei Ruiz Tagle, quién puso trabas a su proyecto y lo acusó de representar “un riesgo para la seguridad nacional”. Finalmente Tompkins, logró que el entonces presidente Ricardo Lagos Escobar declarará en 2005 a Pumalín como Santuario de la Naturaleza. Bajo la administración de la Fundación Pumalín, el parque hoy es de acceso público y espera su declaratoria de parque nacional por parte del Gobierno de Michelle Bachelet, quien no se ha pronunciado sobre este tema pese a que en 2014 Tompkins declara que “estoy seguro de que la Presidenta va a tomar la donación del parque Pumalín como algo positivo”. Este año, además, Tompkins llegó a un acuerdo con el empresario Nicolás Ibáñez, quien se hizo de la propiedad de los fundos Pillán y Hornopirén.
PARQUE NACIONAL CORCOVADO 290.400 Ha / Donado en 2004
La idea de crear este parque nació a comienzos de los noventa cuando Tompkins, junto al filántropo norteamericano Peter Buckley, adquirió los fundos Tic-Toc y Linahua a una empresa europea que pensaba desarrollar un proyecto maderero. En 2002 Tompkins se acercó al entonces presidente Ricardo Lagos con una propuesta: si las tierras en manos de particulares que rodean al volcán Corcovado fuesen entregadas al Estado, ¿cedería el Gobierno las tierras fiscales contiguas de propiedad del Ejército para crear un nuevo parque nacional? La propiedad en cuestión no tenía importancia militar vital, y tanto el presidente Lagos, como el general de Ejército Juan Emilio Cheyre apoyaron la idea y concretaron su creación en enero de 2005.
Con una superficie de aproximadamente 290 400 ha, el nuevo parque nacional Corcovado se convirtió así en el sexto más grande de Chile. En su extensa área existen unos ochenta lagos y un hábitat excepcional para la vida silvestre. El borde costero está cubierto por colonias de aves, pingüinos y mamíferos marinos que crecen a sus anchas en la bahía de Corcovado, la que resultó ser un criadero natural para las ballenas azules, los animales más grandes de la Tierra.
En febrero de 2014, la fundación Melymoyu, que dirige Carlos Cuevas, ex mano derecha de Tompkins, logró que una extensa área de 87 500 ha, ubicada en el golfo de Corcovado fuera declarada Santuario Marino, asegurando así una continuidad de la protección de la vida silvestre desde el fondo del mar hasta las cumbres de las montañas.
PARQUE NACIONAL YENDEGAIA 150.612 Ha / Donado en 2014
En 1998 Douglas y Kristine Tompkins, junto a Adriana Hoffmann y otros activistas de la vida silvestre realizaron una expedición al fundo Yendagaia, ubicado al sur de Tierra del Fuego, utilizado hasta ese entonces como una estancia forestal y ganadera. Impresionados de su potencial de conservación y con la ayuda financiera de los filántropos Ernst Beyeler y Peter Buckley, Tompkins compró el fundo y lo traspasó a la Fundación Yendegaia, hasta que en diciembre de 2013, el expresidente Sebastián Piñera, firmara el decreto de creación del Parque Nacional Yendegaia, conformado por la donación de 38 780 ha, del exfundo privado y la anexión de 111 832 ha de terrenos fiscales adyacentes, totalizando así un área protegida total de 150 612 ha.
En julio de 2014 la denuncia de una caza de caballos baguales, supuestamente autorizada por la fundación de Tompkins, generó una polémica pública que llevó al Ministerio de Bienes Nacionales a amenazar con suspender el contrato de donación. La fundación negó que existiera una matanza intencionada de baguales y aclaró que la caza era una práctica privada común promovida por empresarios de la zona.
La importancia de Yendegaia para los Tompkins es que ésta permitirá contar con un corredor de vida silvestre protegida que se extiende desde la estepa patagónica en Argentina, hasta las tundras y bosques siempreverdes en Chile.
PARQUE NACIONAL PATAGONIA 80.000 Ha / En Proceso de donación
Siendo originalmente una de las estancias de ganadería ovina más grandes de la región, la Estancia Valle Chacabuco o Valchac ha cambiado de dueños muchas veces, incluso fue expropiado en 1964 bajo la reforma agraria de Frei Montalva y reapropiado por el gobierno militar y luego vendido al terrateniente belga, Francoise de Smet, en 1980, quien vendió en 2004 las casi 70 mil hectáreas de la Estancia a la Fundación Patagonia que dirige Kristine Tompkins por una cifra cercana a los 10 millones de dólares. Durante los años siguientes, varias otras propiedades fueron compradas, sumando en total cerca de 80.000 ha.
El plan de Kris Tompkins es unir esta estancia con la Reserva Jeinimeni y la Reserva Tamango, para crear un gran Parque Nacional Patagonia de 263 mil hectáreas.
Mientras la Fundación Conservación Patagonia espera que la donación del parque al Estado se lleve a cabo, los Tompkins iniciaron un ambicioso proceso de conservación y restauración de la vida silvestre local, por medio del retiro del ganado, el retiro de cercos, la restauración de pastizales y bosques y el desarrollo de un proyecto de ecoturismo que incluye un centro de visitantes, un restaurante, sitios de camping, refugios y un lodge que ya ha recibido visitantes de todas partes del mundo que realizan excursiones por la zona. En el interior de la hacienda existía un pequeño cementerio que los Tompkins restauraron bellamente con mampostería y paisajismo. El viejo cementerio de Valchac es hoy la eterna morada de Douglas Tompkins.
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