Carretera Austral, tres imperdibles de nuestra ruta más icónica
Una mochila grande, buenos zapatos de trekking y las ganas de recorrer los más de mil doscientos kilómetros de esta hermosa ruta. Eso es todo lo que necesitas para esta aventura que fue incluida por el New York Times en la lista de los imperdibles para este 2018. Acá, los tres lugares que no puedes dejar de visitar.
Vivimos en un país reconocido a nivel internacional por sus hermosos paisajes y su variada oferta para realizar turismo aventura. De hecho, Chile fue reconocido durante dos años consecutivos como el ‘Mejor Destino para Turismo Aventura’ y se encuentra en proceso para ganarlo por tercer año seguido. Lonely Planet, en tanto, lo galardonó como el Best in Travel 2018. Sabiendo todo esto, me motivé para recorrer una de las rutas más frecuentadas por los mochileros: la Carretera Austral. Aquí, los lugares que no puedes pasar por alto si estás pensando en hacer este inolvidable viaje.
Caleta Tortel
«Tienes suerte que te haya tocado sol», me repetían los habitantes del pueblo durante mi estadía. Es que los rayos UV son un bien escaso en un lugar donde, se dice, llueve alrededor de 300 días al año. Declarado en 2001 como Zona Típica de Chile, este pueblo es una maravilla arquitectónica por sus pasarelas de madera de ciprés de guaiteca, que te invitan a caminar sin prisa por todos sus espacios. Fue oficialmente fundado el 25 de mayo de 1955, aunque ya existían pequeñas casas de colonos sobre roqueríos y vegetación indómita.
Después de once horas de viaje por vía terrestre desde Coyhaique, te alegrará saber que en Caleta Tortel tus pies son el mejor compañero, ya que tienes que dejar tu auto en el único estacionamiento del lugar para recorrer los distintos atractivos, caminando o navegando.
Uno de sus imperdibles es La Isla de Los Muertos. Para llegar, toma un bote en cualquiera de las pasarelas y dirígete hasta este misterioso lugar ubicado en la desembocadura del río Baker –el más caudaloso del país–. Según cuenta la leyenda, aquí descansan los restos de más de un centenar de obreros chilotes, que en 1905 murieron por causas desconocidas y fueron trasladados hasta esta península, ¡un verdadero cementerio de inicios del siglo XX!
Otra opción es el Mirador Cerro Tortel. «¡Aquí todo es madera!», es lo primero que pensé cuando llegué. Es que hasta estos caminos son hechos con este material que, además de mantener el estilo arquitectónico del pueblo, también sirve para no quedar atrapado en el barro que se forma por el clima lluvioso. En lo más alto del cerro, la increíble vista panorámica, desde donde puedes ver la Isla de los Muertos, el Fiordo Mitchell y la desembocadura del río Baker, es el espacio de paz que cualquiera quisiera tener.
Y después de tanta aventura, toma la pasarela que te lleva hasta Chelenka, un espacio para probar la exquisita cerveza artesanal de la zona y celebrar en grande lo hermoso que es Caleta Tortel.
Parque Patagonia
«Cuidado con los guanacos, se ven domesticados, pero son salvajes», es la advertencia que te hacen al llegar a uno de los grandes legados de Tompkins: Parque Patagonia. Se encuentra al sur de la Reserva Nacional Lago Jeinimeni, en el Valle de Chacabuco, y a 17 kilómetros al norte de Cochrane. En 2004, la fundación Tompkins compró la Estancia Valle Chacabuco y con esto el parque se extendió hasta 80 mil hectáreas. Lo primero que te cautiva son los cientos de guanacos que corren libremente sin preocupaciones, ellos son los dueños de casa.
Es además un espacio de desconexión –sin señal de teléfono– donde todos encuentran su lugar; los más aventureros tienen campings como Los West Winds y Alto Valle, que incluyen lujos como agua caliente con energía solar, mientras que los más tradicionales pueden quedarse en el lodge del Valle Chacabuco.
Si buscas aventura, uno de los paseos obligatorios en este parque es el sendero Lagunas Altas. No importa a la hora que vayas, es importante que lleves mucha agua para hidratarte y un buen cortaviento, ya que es una caminata de dificultad media-alta (6 a 8 horas) que te lleva hasta una hermosa laguna altiplánica, desde donde puedes disfrutar avistamiento de aves como el Cóndor.
Capillas de mármol
«El que come Calafate, vuelve a la Patagonia». Ese es un dicho que de seguro vas a escuchar en tu viaje por la Carretera Austral y después de ver las Capillas de Mármol te aseguro que vas a querer regresar. Declarado Santuario de la Naturaleza en 1994, este atractivo ubicado en Puerto Río Tranquilo te hace vivir un gran momento, navegando por el Lago General Carrera hasta llegar a sus grandes atracciones: la cueva, capilla y catedral de mármol, formadas hace miles de años por erosiones del agua. Puedes hacer esta navegación en lancha o kayak, ambas tienen su lado aventurero, ya que ir contra la corriente de este lago es sentirse como en un barco pirata.
¡Ojo para los que quieren casarse! Hay una roca de mármol que, según cuentan, quien la toca se casará en menos de un año e incluso, algunos han aprovechado los días de marea baja para contraer matrimonio en la capilla más hermosa y natural de Chile.
Cómo llegar:
Caleta Tortel: En avión hasta Balmaceda, tomar un bus hacia Coyhaique desde donde salen buses todos los días hasta Cochrane (8 horas). En Cochrane puedes tomar un transfer o hacer dedo hasta Caleta Tortel (3 horas).
Parque Nacional Patagonia: A 17 kilómetros de Cochrane, puedes llegar a dedo o en auto hasta el Cruce Entrada Baker, donde debes doblar y seguir durante 11 kilómetros hasta la oficinal del parque.
Capillas de Mármol: La distancia desde Chile Chico es de 166 kilómetros y desde Puerto Ingeniero Ibañez es de 171 kilómetros; ambos son pasos fronterizos con Argentina.
Antes de salir, en ambas cabeceras de debe consultar el estado del camino de ripio y que las Capillas de Mármol puedan visitarse.
Desde Coyhaique, por la Carretera Austral, son 225 kilómetros.